¿Cómo ayuda la facturación electrónica a las empresas a mejorar su competitividad?
La facturación electrónica es un proceso que consiste en emitir y recibir facturas por medios digitales, con la misma validez legal que las facturas en papel. Desde el año 2015, la facturación electrónica es obligatoria para los proveedores de la Administración Pública en España, y se prevé que se extienda a todas las relaciones comerciales entre empresas y autónomos en el año 2024, según el proyecto de ley “Crea y Crece” aprobado por el Consejo de Ministros.
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Pero, ¿qué beneficios tiene la facturación electrónica para las empresas? ¿Cómo puede ayudarles a mejorar su competitividad en el mercado? En este artículo, vamos a ver algunas de las ventajas que ofrece la facturación electrónica, tanto a nivel interno como externo, y cómo puede contribuir al crecimiento y la transformación de las empresas.
Ventajas internas de la facturación electrónica
La facturación electrónica supone una mejora en la gestión administrativa y financiera de las empresas, ya que permite:
- Ahorro de costes: al eliminar el papel, los gastos de impresión, envío, almacenamiento y archivo se reducen considerablemente.
- Ahorro de tiempo: al automatizar el proceso de facturación, se evitan errores humanos, se agiliza la emisión y recepción de facturas, y se facilita la búsqueda y consulta de las mismas. Además, se reduce el riesgo de demoras, extravíos o duplicidades.
- Seguridad y control: al utilizar la firma electrónica, se garantiza la autenticidad e integridad de las facturas, así como la trazabilidad de las operaciones. Esto permite cumplir con las obligaciones legales y fiscales, y evitar posibles sanciones o reclamaciones.
- Eficiencia y productividad: al optimizar el flujo de trabajo, se mejora la organización y el rendimiento de las áreas implicadas en la facturación, como la contabilidad, el cobro, el pago, etc. Esto se traduce en una mayor rentabilidad y competitividad de la empresa.
Ventajas externas de la facturación electrónica.
La facturación electrónica también tiene un impacto positivo en las relaciones comerciales de las empresas, ya que facilita:
- La lucha contra la morosidad: al disponer de un mayor control y seguimiento de las facturas, se puede exigir el cumplimiento de los plazos de pago, y acceder a mecanismos de financiación alternativa, como el confirming o el factoring. Esto mejora la liquidez y la solvencia de las empresas, y previene posibles tensiones de tesorería.
- La comunicación con clientes y proveedores: al establecer un canal de comunicación digital, se mejora la calidad y la rapidez del servicio, se incrementa la satisfacción y la fidelización de los clientes, y se fortalece la confianza y la colaboración con los proveedores. Esto genera un clima de negocio más favorable y dinámico.
- La contribución al medio ambiente: al reducir el consumo de papel, se disminuye el impacto ecológico de la actividad empresarial, y se contribuye a la preservación de los recursos naturales. Esto refleja una imagen más responsable y comprometida de la empresa, y puede atraer a clientes y socios más concienciados con la sostenibilidad.